La CIA utilizó "El señor de la luz" para liberar rehenes en Teheran

El 4 de noviembre de 1979 en Teherán tuvo lugar el famoso asalto por parte de los estudiantes a la embajada de EEUU en aquella ciudad. 52 personas quedaron secuestradas, y la crisis duró 444 días, con fuerte merma para la imagen de Jimmy Carter.

Lo que no sabían los estudiantes es que 6 integrantes de la embajada se encontraban trabajando en otras dependencias. Esos ciudadanos norteamericanos decidieron ocultarse. Unos días después en la Casa Blanca llegó la noticia: no todos los de la embajada estaban presos. Unos pocos habían conseguido huir y estaban escondidos en Teherán.

La CIA, tras una semana de cavilaciones, decidió poner en marcha un plan sorprendente: un productor irlandés iría a Teherán, solicitando poder rodar en Iran diversas escenas de una película que estaba preparando. Al parecer, a pesar de su actitud externa, el gobierno de Irán llevaba tiempo intentando conseguir inversiones o negocios para el país, lógicamente no estadounidenses, pero sí de otras nacionalidades. Se necesitaba dinero, y el rodaje de aquella película iba a suponer mucho.

Y dicho y hecho. Allí se presentó Tony Mendez, miembro de la CIA, simulando ser el productor irlandés. La película elegida para presentar ante los iraníes fue una adaptación de El señor de la luz de Roger Zelazny. Meses antes, el productor Barry Geller había adquirido los derechos de la obra, y había comenzado a preparar la versión. Así contrató al famoso dibujante Jack Kirby para la parte artística. Las cosas se complicaron y el proyecto terminó frustándose.

Sin embargo, poco después resucitó para el peculiar fin de la CIA. Se le cambió el título a la película por el de Argo. Se creó una productora llamada Studio Six Productions - en referencia a los seis norteamericanos que esperaban el rescate -. Y se insertaron anuncios y reportajes en Variety o Hollywood Reporter.

El 25 de enero de 1980 Mendez estaba en Irán. El plan salió bien y el avión voló de regreso el día 28, con los 6 norteamericanos a bordo.

La historia completa se puede leer en: http://www.wired.com/wired/archive/15.05/feat_cia.html

(Fuente: Wired Magazine)