Crónica de la presentación de “Ambición a la Luz de la Luna” de Robert E. Howard

Howard era rarito.

Crónica de Paco Mancera Romero de la presentación “Ambición a la Luz de la Luna” de Robert E. Howard

A las 20 horas de este pasado viernes 7 de Julio de 2017 en la malagueña Librería En Portada Cómics se celebró la presentación del recopilatorio de textos autobiográficos: Ambición a la Luz de la Luna del texano Robert E. Howard (1906-1936) editado por la malagueña Gasmask en su colección Desiderata.

Tomó la palabra Miguel Ángel Villalobos  editor de Gasmask y tras agradecernos la asistencia y a En Portada el espacio cedido, presentó al malagueño Manuel Berlanga escritor, aficionado y faneditor del añorado Berserkr.
Manuel comenzó leyendo el último texto que escribió en su vida Howard:


“… Todo es fútil… todo ha acabado, echadme pues en la pira…

El festín ha terminado y las lámparas expiran. …”

Tras cerciorarse que su madre en coma no recobraría la consciencia, Howard fue al garaje, se montó en el coche, subió las ventanas, arrancó el motor y se pegó un tiro en la cabeza. Tenía treinta años y era un consolidado escritor de aventuras (la llamada literatura pulp), incluso creó subgéneros nuevos. 


La presentación fue una conversación entre ambos ponentes, que fueron interrumpiéndose constantemente. Miguel Ángel comentó que la gran mayoría de los textos que ahora se presentan son inéditos en España. La selección de estos, su traducción y elaboración de notas ha sido responsabilidad de Javier Jiménez Barco gran conocedor de la obra de Howard y responsable de buena parte de las últimas ediciones de sus textos en España, tanto en el fanzine Barsoom como en sus colecciones de libros. Para redondear el elenco de notables relacionados con esta edición, aparece como maquetador Alberto López Aroca escritor, pastichero y editor.
Los textos están divididos en cuatro bloques cronológicos: La familia Howard donde se nos ubica las raíces de las que tan orgulloso se sentía Howard. En el Instituto un puñado de textos que nos narran los duros inicios del escritor de revistas pulp que acompañan a la novela autobiográfica Post Oaks and Sand Roughs (esta novela si había sido editada anteriormente en España). El tercer bloque, El Escritor de Ficción recopila textos de un Howard consolidado como escritor pulp donde aparecen cartas significativas. Howard formó parte de un exclusivo club de escritores que publicaban en las revistas pulp americanas (H. P. Lovercraft, August Derleth, E. Hoffman Price…)  y que cultivaron una amistad epistolar. El bloque titulado Post Mortem cierra el libro con cuatro textos escritos por sus allegados que dan luz al suicidio.
Sobre el carácter controvertido de Howard, Berlanga, que editó en enero de 1987 el número 6 de su fanzine Bersekr dedicado a él, comentó: En contra de lo que parece (por sus fotografías donde se le aprecia corpulento y fiero) de joven era: Inseguro, rarito, estricto, impulsivo pero controlado y racional. Y en palabra de E. Hoffman Price aunque de adulto era un alma sensible y generoso también albergaba resentimientos extraños, caprichosos, amargos, ilógicos… odios, enemistades, rencores… 


Villalobos destacó que en España Howard tardó en difundirse. Sin duda alguna el general descredito de toda literatura popular hizo que este maestro del pulp, fuese ignorado y sólo el trabajo de aficionados y sus fanzines fueron trayendo en cuenta gotas algunos de sus relatos más allá de Conan. Pero curiosamente tampoco en los EE.UU. abundan sus biografías. Es L. Sprague de Camp con la suya; Dark Valley Destiny (1985, traducido al castellano por Dolmen, 2005) él que reactivara al autor, que empezó con la reimpresión de su personaje más icónico: Conan con añadidos del propio Sprague y luego se fue extendiendo a otros personajes de su pluma. En opinión de Villalobos Sprague, que no destacó por su faceta de escritor, si lo hizo como biógrafo, no en vano también es responsable de Lovecraft: A Biography (1975, Lovecraft. Una Biografía que cuenta con tres ediciones en castellano, la primera en 1978). En su opinión a Sprague no le caían bien estos autores, los “maltrata”. Mientras que la de Lovecraft aún se puede leer, la de de Howard es inasumible. Y eso lo dice el editor de la nueva biografía: H.P. Lovecraft, el caminante de Providence (2016) de Roberto García Álvarez. En ese punto Berlanga apuntó que no es creíble la tesis manifestada por Sprague en su libro, según Sprague, Howard se suicida porque quería a su madre con una devoción exagerada, prácticamente indicando que tendría una dependencia de ella. Nada, en los escritos de Howard indican o dan pie a tal elucubración. A raíz de leer este texto la única mujer que intimó con Howard redactó su propia biografía sobre el texano. Se trata de Novalyne Price Ellis y su One Who Walked Alone (1986, sin publicar en castellano) desmonta esa tesis. Eso sí describe a la madre como posesiva, en exceso protectora con su hijo frente a cualquier “lagarta” que pudiera quitárselo. Sobre este texto está basada la película El que caminaba solo (1996, The Whole Wide World, dirigida por Dan Ireland).
Dieron paso a un intenso turno de preguntas, rompí el fuego yo mismo, pidiendo que leyesen un texto de la página 83, perteneciente a la novela Post Oaks and Sand Roughs:
“… Seguramente, había una cierta vena de salvajismo en los dos jóvenes… en lo más profundo de su alma se agitaba el turbulento espíritu de la antigua y fiera raza caucasiana. Si se arañaba la superficie, un bárbaro de piel blanca saltaba ferozmente a la vida. Pero de ordinario, tal como suele sucederles a los hombres civilizados, dicho instinto se encontraba sumergido bajo múltiples eras de libros y filosofía, salones de té y boudoirs, cultura y dominación femenina. …”


Manuel reconoció que Howard era un hombre de su tiempo, pero que sin embargo había creado personajes femeninos auténticamente protagonistas de sus relatos e independientes: Red Soya de Rogatine (el guionista Roy Thomas y el dibujante Barry Windsor-Smith se inspiraron muy libremente en ella para crear Red Sonja), Valeria, Bêlit e incluso Yasmina. Comentó lo bien documentado historiadamente que estaba Howard sobre el sitio de Viena (1529) que utilizó para su novela La sombra del buitre (1934, The Shadow of the Vulture) y donde aparece Red Soya de Rogatine. Sobre este tema Berlanga escribió un interesante y muy recomendable artículo disponible en este enlace.

A Villalobos se le preguntó que una vez publicados biografías o textos autobiográficos de Conan Doyle (Cruzando la puerta Mágica ) , Lovecraft (la ya citada biografía aquí mi crónica de la presentación) y Howard ¿a quién le toca ahora?  Recordó que también ha publicado sobre Alan Moore (Hechizo en Northampton: Una biolocalización de Alan Moore de Alejandro Barba). Sin embargo, prefirió no adelantar acontecimientos y esperar a que los proyectos estén más avanzados.
Iniciamos el tercer tiempo en un local de restauración aledaño. Las bebidas espirituosas comenzaron a fluir adecuadamente. Por desgracia tuve que atender otros asuntos y me ausenté cuando empezaba la mejor parte.

Quiero agradecer a Manuel Berlanga que me haya cedido sus notas para elaborar esta crónica. En esta ocasión no he podido usar la habitual grabación del audio de la presentación, por haber cambiado de móvil y mi ya proverbial torpeza con los nuevos gadgets la malogró. En cualquier caso los errores y burradas son todas de mi autoría.
by PacoMan







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